Mala suerte en el amor, buena suerte en??? I I parte

Cuando escucho a Rodrigo, excusar su comportamiento tan inestable para conmigo. Me es inevitable verlo como un espejo. Los mismos miedos, la eterna cobardía, el mismo asqueroso conformismo.

Cuando Sergio me patio, por primera vez en mi vida sentí esa presión en el pecho, que te impide respirar. Sentía que me ahogaba, por la falta de aire, por la falta de el, por las lagrimas que brotaban, como si tuvieran vida propia.
Por una semana fui un cadáver andante, deshidratada y raquítica.
Si mis estimados, una semana tan solo.
Soy tan racional, que me di un tiempo limite para llorarlo.
Cuando el tiempo caduco, me seque bien los ojos y comencé la etapa de olvido.
Y como un plus, prometí que nunca más dejaría que mis miedos dominaran mi vida, otra vez.

Y así fue pasando el tiempo poco a poco.
Continué agregando conquistas a mi prontuario, en espera de un mejor postor.
Y ojo que no me refiero al macho top model con plata o futuro asegurado, sino a ese alguien que de inmediato provoque cortes circuitos en mi piel.
Con una mirada
O con simplemente estar.

Y justamente “rodriguito” tenía que aparecer en escena y provocarme lo anterior.


El sábado pasado, volví a ver a este personaje que prometió jugársela por mi, hace un mes atrás. No me miraba ni de reojo, estaba tan chupao que parecía estatua. Imagino que le daba vergüenza estar conmigo, luego de lo que dijo la última vez que estuvimos juntos.
Cuando por fin el don, se atrevió a hablarme…

Te compré la entrada a ozzy.- me dijo.-

Que!!!!!!!!.- contesté.-

Que te compré la entrada pa´ozzy, yo se que querías ir así que… .- siguió.-

Pero porque???, no nos vemos hace mas de un mes y ahora me venís con esta sorpresita!
Sabis como me siento Rodrigo, como esas minas que se casan con weones, que trabajan todo el tiempo dejándolas solas y luego compensan la falta de afecto con regalos caros. Gracias por la invitación, pero prefiero no ir. .- le dije:-

Ahí la cara le cambio y comenzó a decir que yo lo atacaba y bla bla bla y de repente se para de la silla y se va.

Yo quede plop!
Pero en esta filosofía de aclarar todo, Salí tras el y cuando al fin lo alcance…